La mayoría os preguntareis el porqué de este título para encabezar el relato sobre las hazañas de los gallegos en el TIE 13; y no es para menos. Pues la alusión le viene como anillo al dedo.
Igual que la Ilíada y la Odisea de Homero se narran la gran batalla de Troya y el posterior retorno de Ulises a su tierra natal; nosotros tenemos dos historias que contar; llenas de hazañas, aventuras y personajes.
Los que lo han vivido ya saben de que se trata...los que no... no tardareis en entenderlo; aquí arranca nuestro relato:
Un viaje que comienza, rápido; con muchas ganas; miradas inquietas en la estación, alguien mira el reloj... aun no estamos todos... falta... falta el mandoble de Roy, Aluku se queda dormido y es físicamente imposible que recorra la ronda de Outeiro en apenas 5 minutos...
Los asientos están muy repartidos y el revisor en seguida nos ordena separándonos en varios grupos... no le servirá de nada, el caos es inminente. Más cuando se nos une el vagón que viene desde Vigo... ya estamos todos.
El viaje pasa con muchas risas, bromas, juegos...resistencia, resistencia y más resistencia (todo el vagón de Vigo sabe jugar ya al resistencia y seguro que la mitad del tren odia a Estéfano) El viaje se hace largo... llegamos cansados, la estación de Delicias se nos muestra como una gran ciudad de bienvenida; y Uliq que nos espera para guiarnos junto con nuestros compañeros de Zaragoza. Pronto nos repartiremos para ir a Lenciñeda.
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